El Volcán Cerro Negro es uno de los volcanes más jóvenes y activos de Nicaragua, ubicado en el departamento de León, a unos 25 kilómetros al noreste de la ciudad de León. Su nombre se debe al color oscuro de sus laderas, formadas por cenizas y rocas volcánicas que le otorgan una apariencia negra e imponente.

### Características Principales
– **Altura:** Aproximadamente 728 metros sobre el nivel del mar.
– **Tipo de volcán:** Es un volcán de tipo cónico y es considerado un «volcán en escudo» debido a su forma y la manera en que ha crecido a partir de erupciones de lava y cenizas.
– **Actividad volcánica:** Desde su formación en 1850, el Cerro Negro ha tenido más de 20 erupciones, siendo una de las más recientes en 1999. A pesar de su juventud, es uno de los volcanes más activos de Nicaragua, y su actividad ha sido constante, con erupciones frecuentes que varían en intensidad.

### Erupciones
El volcán ha experimentado erupciones tanto explosivas como efusivas, expulsando cenizas, rocas y lava. Estas erupciones han modificado su forma y tamaño a lo largo del tiempo, y han dejado su marca en el paisaje circundante, cubriendo de cenizas vastas áreas alrededor del volcán.

### Turismo y Deporte
Cerro Negro es muy popular entre los turistas, especialmente aquellos que buscan aventuras extremas. Es uno de los pocos lugares en el mundo donde se puede practicar **»volcano boarding»** o surf volcánico. Este deporte consiste en deslizarse por las empinadas laderas de ceniza del volcán utilizando una tabla especial. Los turistas suelen subir caminando hasta la cima, lo que toma aproximadamente una hora, y luego descender deslizándose por la ladera, lo que proporciona una experiencia única y emocionante.

### Conservación y Protección
A pesar de su popularidad como destino turístico, el Cerro Negro está protegido como parte del área de conservación que incluye otros volcanes cercanos. Esto garantiza que la actividad turística no afecte negativamente al ecosistema ni a la seguridad de los visitantes.

El Volcán Cerro Negro es un testimonio de la intensa actividad geológica de Nicaragua y un símbolo de la fuerza natural que caracteriza a la región. Su combinación de juventud, actividad continua y atractivo turístico lo convierte en un lugar fascinante tanto para científicos como para aventureros.